/p>Si los centros residenciales pudieran prescribir medicamentos se mejoraría la gestión farmacéutica. Esta es una de las principales conclusiones de un estudio encargado por la Fundación Edad&Vida plantea que para mejorar la gestión farmacéutica en los centros residenciales es esencial, entre otros aspectos, un cambio legal que les permita prescribir medicamentos a sus pacientes y ponga fin al modelo actual en el que los centros únicamente aplican el tratamiento médico prescrito en el ámbito sanitario.
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El actual modelo de gestión de medicamentos en centros residenciales no garantiza un servicio de calidad

Así lo señaló Josep Pascual, miembro de la Fundación Edad&Vida y director técnico-asistencial de SARquavitae, en la mesa de debate “Gestión farmacéutica y de productos sanitarios en centros residenciales”, que se celebró en el V Congreso Internacional Dependencia y Calidad de Vida.
Josep Pascual presentó los resultados del estudio “Efectividad y eficiencia en la utilización y gestión de productos farmacéuticos y sanitarios en centros residenciales”, realizado por la Fundación Edad&Vida para conocer el perfil sanitario de las personas ingresadas en centros residenciales, que ha analizado 111 centros de toda España que representan 14.500 plazas residenciales.
El documento pone de manifiesto las principales necesidades de carácter sanitario de los residentes y concluye que conllevan una prestación farmacéutica compleja, así como la utilización de productos sanitarios y de nutrición integral.
Por ello el director técnico-asistencial de SARquavitae abogó por un cambio de modelo que permita a los médicos de los centros residenciales prescribir la medicación a sus pacientes para superar el modelo actual en el que sólo pueden ejercitar esta atribución de una manera indirecta, según la prescripción que llega del sistema sanitario.
Además, señaló que el modelo actual no sólo es más costoso sino que genera problemas logísticos y de gestión a los centros que se podrían evitar con una regulación diferente.
En este sentido, Lluis Segú Tolsa, director del estudio, afirmó que “el modelo de gestión de medicamentos actual en las residencias asistenciales no es el más adecuado para desarrollar una atención farmacéutica de calidad”. El trabajo de Segú trata de definir un modelo de gestión farmacéutica más eficiente desde la triple perspectiva que, en su opinión, debe presidir cualquier modelo de gestión de medicamentos que aspire al éxito: disponibilidad, uso adecuado y eficiencia. Para ello, ofrece una herramienta de gestión para validar la mayor o menor eficacia del modelo de gestión de medicamentos de un centro concreto.
Así, una de las principales conclusiones del estudio es que el modelo de acceso a los productos y su consiguiente modelo de financiación continúan siendo la clave para explicar el poco desarrollo de determinadas actividades y políticas dirigidas a la mejora de la utilización de medicamentos y productos sanitarios.
En su conjunto, el estudio revela que la situación actual “sitúa la gestión de los medicamentos y productos sanitarios en los centros residenciales en un marco del que potencialmente derivan ineficiencias para todos los actores. Los incentivos no están correctamente alineados y, en consecuencia, la gestión de estos productos no es la más adecuada para nadie”.
Analizados estos factores, las recomendaciones de la Fundación Edad&Vida para evolucionar hacia un modelo eficiente de gestión de los productos farmacéuticos y sanitarios en las residencias asistidas pasan, entre otras medidas, por la promoción de un cambio de modelo de acceso a los productos y su financiación, la incorporación de una tarifa asistencial integrada, la fijación de objetivos claros de gestión no vinculados al coste sino a la calidad de la utilización, y la implantación de un Servicio de Farmacia en todas aquellas residencias con más de 100 plazas.