/p>Matia Fundazioa ha puesto en marcha un novedoso programa para el fortalecimiento muscular y mejora del equilibrio de las personas mayores, cuyo objetivo es conseguir el máximo bienestar de las personas en su proceso de envejecimiento.
Se trata de un programa de ejercicio físico multicomponente que combina entrenamiento de fuerza, resistencia, equilibrio y marcha. Este tipo de ejercicio mejora el patrón de la marcha y permite que las personas mayores ganen en capacidad funcional, en estabilidad y confianza, y por tanto que se reduzcan el riesgo de caídas.
Geriatricarea Matia Fundazioa programa para el fortalecimiento muscular y mejora del equilibrio
El incremento de la actividad física en personas mayores reduce el riesgo de mortalidad

El programa de Matia Fundazioa tiene una duración de 3 meses a razón de 1 hora 2 veces por semana. En cada sesión los participantes realizan ejercicios de equilibrio (tapiz de equilibrio y ejercicios individuales) y otros ejercicios en máquina en los que se trabaja la fuerza muscular. Todo ello bajo la supervisión de una fisioterapeuta.
Los participantes en este programa pasan una valoración médica previa por un especialista en geriatría y una serie de valoraciones funcionales y cognitivas, que se repiten al finalizar el programa para comprobar el grado de mejora alcanzado.
Hasta el momento han participado en este programa 11 personas y los resultados obtenidos son satisfactorios, ya que se han producido mejoras entorno al 18% en las pruebas que miden equilibrio y de un 32% en la fuerza muscular.
Según las estadísticas, cada año 150 vascos de más de 64 años mueren tras sufrir una caída en el hogar, por lo que la necesidad del uso de medidas preventivas para disminuir el riesgo y número de caídas, y mejorar el equilibrio y la marcha es evidente.
Tal y como señalan los especialistas de Matia Fundazioa, con el envejecimiento la capacidad funcional del sistema neuromuscular, cardiovascular y respiratorio empieza a disminuir de forma progresiva lo que conlleva un riesgo de aumento de la fragilidad. La disminución de la cantidad y calidad de masa muscular, el progresivo deterioro del sistema neuromuscular, las reducciones de fuerza y especialmente de potencia muscular, junto con la pérdida de función es uno de los principales factores que influyen en la disminución de la capacidad de mantenerse independiente en la comunidad y está en el origen de la discapacidad.
Por ello, los beneficios del ejercicio físico en el envejecimiento y específicamente en situaciones de fragilidad son muy importantes. Se ha comprobado que el incremento de la actividad física en personas mayores reduce el riesgo de mortalidad, de enfermedades crónicas prevalentes, de institucionalización y de deterioro funcional.
El tipo de ejercicio físico más beneficioso en el anciano frágil es el denominado multicomponente en los que se combina entrenamiento de fuerza, resistencia, equilibrio y marcha. Los objetivos a la hora de pautar ejercicio físico en el anciano frágil deberían centrarse, por tanto, en mejorar dicha capacidad funcional a través de mejoras en el equilibrio y la marcha, y en consecuencia de la disminución del riesgo y número de caídas.