Desde el Imserso se alerta que se ha activado en algunas zonas del territorio nacional (Granada, Jaén, Madrid, La Rioja, Cuenca, Guadalajara, Albacete, Palencia, Zamora, Salamanca, Burgos, Soria, Girona y Lleida), el nivel 2, y en otras (Huesca y Zaragoza), el nivel 3, de riesgo establecido en el Plan Nacional de actuaciones preventivas de los efectos del exceso de temperaturas, por lo que procede intensificar la información a la población y a personas y colectivos más vulnerables a la exposición a calor excesivo, como las personas mayores.

Desde el Imserso se recuerdan los consejos de prevención publicados en la web del Plan Nacional de Actuaciones preventivas por Altas Temperaturas del Ministerio de Sanidad, figuran las recomendaciones generales de protección y prevención frente a temperaturas elevadas.


geriatric area Imserso exceso de temperaturas
Mapa de asignación de niveles (a fecha de 15/06/22). Plan Nacional de Actuaciones preventivas de los efectos del exceso de temperaturas sobre la salud

Los consejos de prevención son los que se recogen a continuación y, aunque cualquier persona puede sufrir un problema relacionado con el calor, es necesario prestar especial atención a: bebés y niños y niñas pequeñas, embarazadas o madres lactantes, así como personas mayores o con enfermedades que puedan agravarse con el calor (como las enfermedades cardiacas, renales, diabetes, hipertensión, obesidad, cáncer, patologías que dificultan la movilidad, demencia y otras enfermedades mentales, así como el abuso de drogas o alcohol).

#VERANOySALUD

  1. Bebe agua y líquidos con frecuencia, aunque no sienta sed y con independencia de la actividad física que realice.
  2. Evita las bebidas con cafeína, alcohol o muy azucaradas, ya que pueden favorecer la deshidratación.
  3. Permanece el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados, y refréscate cada vez que lo necesite.
  4. Procura reducir la actividad física y evitar realizar deportes al aire libre en las horas centrales del día.
  5. Usa ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
  6. Nunca dejes ninguna persona en un vehículo estacionado y cerrado (especialmente a personas menores de edad, mayores o con enfermedades crónicas).
  7. Consulta a tu profesional sanitario ante síntomas que se prolonguen más de una hora y que puedan estar relacionados con las altas temperaturas.
  8. Debes mantener las medicinas en un lugar fresco, ya que el calor puede alterar su composición y sus efectos.
  9. Haz comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, zumos, etc.).

Por su parte, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) recalca que las temperaturas extremas son peligrosas a cualquier edad, pero en los adultos mayores -independientemente de la edad que tengan- la presencia de deterioro cognitivo y otras patologías que afectan a la capacidad de comunicar, junto a las alteraciones funcionales, dificultan la correcta hidratación y favorecen que el calor sea más peligroso en estas edades. 

Para evitar riesgos es esencial una correcta hidratación y aportar agua, infusiones, zumos de frutas, gelatinas, aunque no se tenga la sensación de sed. Es importante evitar la exposición solar en las franjas horarias de más temperaturas y emplear elementos como gorras y sombreros cuando se esté en el exterior. En el interior de los domicilios es importante mantener las estancias frescas y ventiladas, evitando las prendas ajustadas y el ejercicio físico –siempre recomendable en el adulto mayor- en los momentos del día con temperaturas altas. 

La SEGG señala que conviene establecer pautas similares a las habituales, de modo que se favorezca la mejor adaptación de los mayores con alteración cognitiva a los nuevos entornos y ambientes. Y para la prevenir la hipertermia se recomienda:

  • Un buen aporte de líquidos. La falta de sed es engañosa, por lo que se debe consumir frecuentemente agua, infusiones, zumos de frutas, aunque no se tenga la sensación de sed; y evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
  • Las comidas deben ser ligeras lo que permite digestiones ligeras.
  • Evitar la exposición al sol con temperaturas elevadas, sobre todo en las horas de mayor intensidad (12-16 horas) y con una humedad relativa alta (mayor del 60 por ciento).
  • No realizar ejercicio ni deportes que aumenten el esfuerzo y la sudoración en momentos de calor.
  • Mantener la casa fresca y ventilada.
  • No permanecer en vehículos estacionados o cerrados.
  • Evitar llevar ropa ajustada y elegir tejidos ligeros, como el algodón y de colores claros, preferentemente.
  • Es recomendable, además, el uso de sombreros o gorras que protejan nuestra cabeza del sol.