La Diputación Foral de Gipuzkoa, junto a ADINBERRI, lidera el proyecto europeo de teleasistencia predictiva KORALE, que tiene como objetivo crear una comunidad de conocimiento en el abordaje y prevención de la soledad no deseada. El proyecto ya se ha implantado en Oarsoaldea y pretende mejorar la calidad de vida, la autonomía y la seguridad de más de 200 personas usuarias del servicio de teleasistencia betiOn del Gobierno Vasco. 

Los seis socios que forman KORALE se han reunido recientemente en Lisboa para intercambiar buenas prácticas que ayuden a paliar la soledad no deseada, un fenómeno en crecimiento en las sociedades occidentales. Así, este proyecto, liderado por la Diputación Foral a través de la fundación ADINBERRI, y en el que participan otras cinco regiones europeas (de Portugal, Austria, Bélgica, Dinamarca e Irlanda), busca mejorar afrontar el desafío de las soledades no deseadas en el continente y crear una comunidad de conocimiento y buenas prácticas para abordar este fenómeno cada vez más creciente.

geriatricarea KORALE adinberri
El proyecto KORALE tiene como objetivo crear una comunidad de conocimiento para el abordaje y prevención de la soledad no deseada

En este encuentro, la diputada de Cuidados y Políticas Sociales de la Diputación Foral de Gipuzkoa, Maite Peña, y la directora de ADINBERRI, Rakel San Sebastián, acompañadas de la responsable de Innovación, Ainhoa Becerra, y Patricia García Collado en representación de Ayesa -empresa participante en el proyecto de teleasistencia predictiva- han explicado los avances de la iniciativa, que se puso en marcha en diciembre.

Tal y como explicaron, esta iniciativa contribuye a que el territorio avance hacia un nuevo modelo de servicio predictivo, que permite anticiparse y actuar en la prevención de situaciones de dependencia y fragilidad gracias a la implantación de nuevas tecnologías como IA, IoT o Big Data.

La UTE formada por Ayesa e Illunion Vida Senior, a través de un consorcio de empresas y startups especializadas en diversas tecnologías, ha sido la encargada de implantar en los domicilios los dispositivos necesarios. Con esta tecnología se consigue:

  • comprender rutinas individuales y grupales
  • establecer patrones de comportamiento normal
  • detectar desviaciones
  • evaluarlas a tiempo

Esto permite saber, por ejemplo, cuánto tiempo pasa un usuario o usuaria en la cocina, en la sala o en la cama para conocer sus rutinas e identificar variaciones significativas que podrían ser signos de deterioro cognitivo progresivo o problemas de salud; o detectar usos de electrodomésticos como el frigorífico o de desplazamientos en horarios atípicos que podrían indicar alteraciones conductuales o fisiológicas.

Pero, además, este proyecto piloto va más allá y pretende anticipar situaciones críticas no solo por aspectos físicos, sino también por riesgo emocional o de aislamiento y soledad no deseada. Las herramientas de procesamiento de habla pueden identificar precozmente este tipo de situaciones, lo que ayudará a su abordaje y prevención en personas mayores que viven en sus domicilios.

Además de Gipuzkoa, el resto de socios europeos ha presentado también sus buenas prácticas para hacer frentes a la soledad, fundamentalmente entre dos colectivos: las personas jóvenes y las personas mayores. Así, han presentado modelos transferibles e intervenciones piloto que abordan la soledad en diferentes contextos demográficos y urbanos.

Tal y como señaló la diputada de Cuidados y Políticas Sociales, Maite Peña, «tener el liderazgo de KORALE es una oportunidad extraordinaria para Gipuzkoa, porque nos permite aprender, reflexionar y compartir buenas prácticas en el camino de paliar esta realidad que debe ser el eje de las políticas públicas. Formar parte de esta red europea y crear una comunidad para conocer e intercambiar experiencias positivas es fundamental para seguir trabajando en la mejora del bienestar integral de las personas mayores del territorio».

Por su parte, Rakel San Sebastian, directora de ADINBERRI, señaló que Europa ya ha reconocido otras dos buenas prácticas puestas en marcha por Gipuzkoa como son HARIAK Kantuz, una iniciativa junto a la Federación de Coros de Gipuzkoa para abordar la soledad a través de los coros; y Kalelagun, un proyecto del departamento de Arquitectura de la EHU para construir la primera plaza pública en Beasain que aborda desde su diseño el fenómeno de la soledad.

El de Lisboa ha sido tercer encuentro de KORALE y ha incluido un panel de expertos, buenas prácticas inspiradoras y oportunidades de intercambio directo entre profesionales y responsables políticos.