Un artículo de María Dolores Nieto de Haro,
Médico especialista en Geriatría en la Unidad de Psicogeriatría Fundación Hospitalarias Málaga
y Profesora Asociada del Dpto. de Psiquiatría, Facultad Medicina Málaga

En nuestras vidas hay momentos para recordar: el nacimiento de un hijo, el primer amor, el olor de un perfume, una música de nuestra infancia…

Nuestra memoria nos acompaña y nos transfiere identidad. ¿¿Que ocurre cuando esta comienza a perderse??

No solo cambia la vida de la persona que lo padece, sino también de los familiares que la acompañan.

geriatricarea memoria
Mantener el cerebro activo con ejercicios mentales contribuye a preservar la memoria

El deterioro cognitivo va apareciendo poco a poco. Una palabra que no sale, una desorientación en la calle, un olvido importante…

A medida que el tiempo transcurre la memoria se va deteriorando y las personas mas cercanas se van dando cuenta de que algo ocurre.

Es el momento de acudir al especialista, ya que un diagnóstico precoz puede servir no para curar la enfermedad, pero si podemos contribuir con pequeños hábitos a enlentecer el proceso.

Es de suma importancia mantener el cerebro activo con ejercicios mentales, aprendizaje continuo, estimulación sensorial.

Mantener el cuerpo en forma con alimentación adecuada y con ejercicios físicos adecuados a cada persona son fundamentales en la prevención.

La estimulación social es otro de los pilares cada vez más demostrados, contribuyendo a la mejora del estado anímico y a evitar la soledad que padecen muchos de nuestros mayores.

Se ha de evitar los hábitos que pueden perjudicar como el alcohol y el tabaco y controlar el estrés para mantener la mente serena.

Todo ello contribuirá a mejorar la calidad de vida y a preservar la memoria.