La disfagia afecta en España a más de 2 millones de personas, entre ellas a muchos ancianos (1 de cada 4) y personas que sufren Alzheimer, Parkinson, ELA o un ictus, para quién comer es un drama al no poder tragar y correr el riesgo de atragantarse.

Pensando en estas personas, la Fundación FUREGA ofrece en su web  un centenar de recetas seguras, adaptadas según la textura que necesite cada persona y muy apetecibles. Para acceder a ellas, las personas que padecen disfagia o sus familias pueden pedirle a su  médico, nutricionista, logopeda o profesional de la salud que las solicite gratuitamente a la fundación  y  con su asesoramiento podrán hacerlas en casa de forma sencilla.

geriatricarea disfagia Fundacion Furega
Fundación FUREGA propone un menú navideño para personas con disfagia compuesto por canelones, huevos rellenos (en la imagen), pollo asado y pastel de queso

Para estas fiestas navideñas propone un menú compuesto por canelones, huevos rellenos, pollo asado y pastel de queso. Para las personas que sufren disfagia es importante que no pierdan la ilusión ni las ganas de comer, por lo que el equipo de profesionales de FUREGA ha elaborado platos seguros pero muy alejados de los típicos triturados espesados sin ningún sabor. 

La Fundación FUREGA, pionera en la investigación sobre disfagia y formada por médicos especialistas,  ha creado recetas nutricionalmente adecuadas y sabrosas, con varios tipos de cocciones (no solo hervidos), texturas , colores, que invitan a comer y donde se distingue el primer plato del postre.

Las personas afectadas por disfagia orofaríngea no pueden tragar y/o masticar alimentos o líquidos de forma eficaz, por lo que no logran alcanzar la ingesta calórica necesaria, lo que genera estados de desnutrición y deshidratación que los hace más frágiles y vulnerables, advierten desde la Fundación Furega.

En la actualidad, los trastornos de la función deglutoria son una pandemia emergente que afecta a más de 2 millones de españoles. La disfagia alcanza, según diversos estudios, a 1 de cada 4 personas mayores y ya se la considera un síndrome geriátrico, ya que afecta al 27% de los pacientes mayores de 70 años que viven en la comunidad, al 56-78% de los ancianos institucionalizados en residencias geriátricas y hasta el 47,5% de los ingresados en centros sanitarios por enfermedades agudas.