Un artículo del equipo Grupo 5 CIAN
Centros de Atención Integral Neurorrehabilitadora

El síndrome geriátrico se utiliza para referirse a un conjunto de cuadros, signos y síntomas, que son originados como consecuencia de los efectos de la acumulación de deterioros en múltiples sistemas volviendo a la persona mucho más vulnerable y generando en muchos casos incapacidad funcional y social.

En el marco del cuidado de la persona con síndrome geriátrico, desde los centros y servicios de atención deben proponer un modelo de envejecimiento activo que tenga como objetivo aumentar la autonomía teniendo en cuenta todos los factores del Síndrome Geriátrico para ajustar cada actividad y programa de rehabilitación. No olvidemos que para cualquier persona, más para las personas mayores, la autonomía es uno de los pilares de la calidad de vida, por lo que hay que considerar cada problemática para darle una solución efectiva que le ayuda a la persona a mantener o aumentar esta.

Cuando hablamos de síndrome geriátrico hablamos de:

Inmovilidad
Es un deterioro de las funciones motoras y que impide realizar las actividades de la vida diaria con normalidad. Las causas más frecuentes son:  Los cambios biológicos a causa del envejecimiento, enfermedades musculoesqueléticas, problemas a nivel cardiaco, respiratorio y neurológicos.
Las consecuencias de la inmovilidad son tener un alto riesgo de caídas, pérdida de masa y fuerza muscular, dificultad en el equilibrio y en consecuencia en el caminar, el aumento de riesgo de padecer UPP (úlceras por presión) o problemas de salud mental como depresión, ansiedad, miedo, aislamiento social y dependencia.

geriatricarea sindromes geriatricos
El síndrome geriátrico soporta numerosas sintomatologías y señales que ayudan a percibir su aparición y desarrollo prevenible

Inestabilidad-caídas
La inestabilidad provoca caídas y en muchos casos se relaciona con la dificultad para levantarse. Son la principal causa de lesiones en personas mayores.  Existen factores de riego asociados como enfermedades crónicas, disminución de la visión, problemas de audición consumo de fármacos, tipo de calzado.

Incontinencia urinaria y fecal
Es la pérdida del control de los esfínteres. La continencia depende de varias cosas, de la vía urinaria baja, del estado mental y de la movilidad, debilidad de los músculos del recto y de los intestinos, lesiones de los nervios, prolapsos, hemorroides, cirugías.
Los factores de riesgo son las alteraciones cognitivas, fármacos, hospitalización, partos, estado mental, cirugía genitourinarias y digestivas, enfermedades cardiovasculares y enuresis en la infancia. Algunas de las consecuencias pueden ser: ITU (infección del tracto urinario), UPP, caídas, depresión, baja autoestima, aislamiento social, mayor gasto económico.

Estreñimiento e impactación fecal:
El estreñimiento es un problema que afecta con mucha frecuencia a los ancianos.  La inmovilidad, la deshidratación, la toma de determinados medicamentos y el envejecimiento fisiológico del cuerpo predisponen al cuerpo a sufrir esta dolencia. No menos importantes son las complicaciones que conlleva, como hemorroides, impactación fecal, fisuras, incontinencia fecal y prolapsos.

Úlceras por Presión – UPP
En ancianos que presentan inmovilidad hay un mayor riesgo a presentar UPP, en estas personas participan otra serie de factores que favorecen las úlceras, como la fricción, la humedad o la incontinencia urinaria o fecal. Los factores de riesgo son, como hemos dicho anteriormente, la inmovilidad, desnutrición, trastorno sensorial, obesidad tabaquismo falta de higiene y enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión arterial (HTA)

Polimedicación
Se entiende por polimedicación la toma diaria de más de cinco fármacos, de forma continua y en un periodo de tiempo mayor a seis meses. Las causas más frecuentes son los efectos secundarios, las interacciones entre varios medicamentos e incumplir la pauta prescrita por el facultativo.

Trastornos del sueño
La falta de sueño puede causar confusión, cansancio, fatiga malestar, deterioro de la memoria, de la atención y concentración, somnolencia diurna, aumentar el riesgo de caídas, aumentar la ingesta de fármacos que a su vez vuelve a aumentar el riesgo de caídas, dolor de cabeza y problemas gastrointestinales.

Alteraciones en vista y oído
Las alteraciones y trastornos de la vista y oído empeoran la calidad de vida de los ancianos y dificulta la realización de las actividades básicas diarias (AVD).  Las enfermedades más recurrentes son presbicia, degeneración macular, cataratas y glaucoma, todas ellas cursan con pérdida de visión.
El deterioro de la agudeza auditiva también empeora la calidad de vida y dificulta la realización de las AVD. La más conocida es la presbiacusia que aumenta el peligro de sufrir accidentes domésticos y aumenta el riesgo de caídas. La pérdida de audición genera además una situación de aislamiento social de la persona mayor.

Inmunodeficiencias
Los ancianos presentan un debilitamiento del sistema inmune que hace que responda de manera inapropiada y eso les hace ser más vulnerables. Para ello es muy importante cuidar la alimentación y asegurarnos de que se está recibiendo una alimentación equilibrada y una correcta hidratación.

Infecciones
Las enfermedades infecciosas en el anciano tienen diferencias con respecto a otros grupos de edad. Los ancianos presentan un debilitamiento del sistema inmune que hace que responda de manera inapropiada y eso les hace ser más vulnerables.

El síndrome geriátrico soporta numerosas sintomatologías y señales que nos ayudan a percibir una aparición y desarrollo prevenible, y junto a un diagnóstico adecuado son susceptibles de tratamiento. Desde los centros y servicios que atendemos a personas mayores, en nuestro caso, los centros de atención neurorrehabilitadora Grupo 5 CIAN, valoramos y abordamos interdisciplinarmente las necesidades de asistencia sanitaria, de atención rehabilitadora y de apoyo social para favorecer la inclusión social y la autodeterminación.

Y, tal y como apuntaba hace poco, Luis Agüera, psiquiatra y asesor del centro de personas mayores y salud mental Grupo 5 Puerta de Hierro, no todas las personas envejecen de la misma manera, por lo que hay que conocer a fondo sus aspectos biológicos, funcionales, patológicos y vivenciales para conocer la peculiaridad de cada persona y poder ofrecerle los recursos más adecuados, siempre visualizando el mayor aumento posible de su calidad de vida.