El Ejecutivo ha dado luz verde definitiva al incremento de las prestaciones de la Seguridad Social que beneficiará a más de 13 millones de perceptores. Los aumentos varían significativamente según la modalidad de pensión, alcanzando hasta el 11,4% en determinados casos.
Incrementos diferenciados según el tipo de prestación
Mediante un real decreto ley aprobado en el último Consejo de Ministros del año, el Gobierno ha establecido tres niveles de incremento para 2026. Las prestaciones contributivas ordinarias experimentarán un ajuste del 2,7%, mientras que las mínimas verán incrementadas sus cuantías en un 7,07% de media. El mayor aumento corresponde a las pensiones no contributivas y al Ingreso Mínimo Vital, con un 11,4%.
Esta medida responde al mecanismo de actualización automática vinculado al Índice de Precios al Consumidor promedio registrado entre diciembre de 2024 y noviembre de 2025.
¿Cuánto cobrarán los jubilados con pensión contributiva?
Para los perceptores de la prestación media de jubilación contributiva, que actualmente se sitúa en 1.511,5 euros mensuales, el incremento supondrá pasar a percibir 1.552,3 euros al mes. En términos anuales, esto representa un aumento de 571,35 euros en las 14 pagas.
La pensión máxima del sistema alcanzará los 3.359,6 euros mensuales, frente a los 3.267,6 euros de 2025. Este incremento del 2,815% combina el IPC más un plus adicional de 0,115 puntos porcentuales, aplicable anualmente hasta 2050 según la reforma estructural aprobada en 2023.
Pensiones mínimas: el mayor impulso para los colectivos más vulnerables
Los mayores que perciben pensiones mínimas verán mejorada su situación económica de forma notable. Las jubilaciones con cónyuge a cargo pasarán de 1.127,60 euros mensuales a 1.255 euros, lo que representa un incremento del 11,4% destinado a fortalecer la protección de las unidades familiares más vulnerables.
Para jubilados con 65 años o más sin cónyuge, la cuantía ascenderá de 874,40 euros a 936,20 euros mensuales. Aquellos con cónyuge no dependiente económicamente percibirán 888,70 euros frente a los 830 euros actuales.
Grandes invalideces y casos especiales
Las situaciones de gran invalidez experimentarán incrementos proporcionales. Con cónyuge a cargo, la prestación alcanzará los 1.884,11 euros mensuales (26.377,51 euros anuales), mientras que sin cónyuge llegará a 1.404,34 euros al mes.
Prestaciones no contributivas: refuerzo para quienes no alcanzaron cotizaciones suficientes
Los mayores que accedieron a pensiones no contributivas de jubilación verán incrementada su prestación íntegra hasta 629,08 euros mensuales, frente a los 564,70 euros de 2025. Esta mejora del 11,4% busca reducir la brecha de protección social.
En el caso de invalidez no contributiva con necesidad de asistencia de tercera persona (grado de discapacidad igual o superior al 75%), la cuantía con el incremento del 50% alcanzará los 943,61 euros mensuales, sumando 13.210,59 euros al año.
Viudedad: incrementos adaptados a cada situación familiar
Las pensiones de viudedad también se han actualizado con criterios diferenciados. Cuando existen cargas familiares, la cuantía pasará de 1.127,60 euros a 1.256,15 euros mensuales, aplicando el máximo incremento del 11,4%.
Para mayores de 65 años o personas con discapacidad igual o superior al 65%, la pensión será de 936,21 euros al mes. Los viudos de entre 60 y 64 años percibirán 875,78 euros, mientras que los menores de 60 años sin cargas familiares alcanzarán los 709,32 euros mensuales.
Impacto en residencias y centros sociosanitarios
Estos incrementos tendrán un efecto directo en la capacidad económica de los residentes de centros geriátricos. Las cuantías mejoradas facilitarán el acceso a servicios de mayor calidad y reducirán la presión económica sobre las familias que complementan el coste de las plazas residenciales.
Para los profesionales del sector sociosanitario, estos ajustes representan una señal positiva hacia la mejora progresiva del poder adquisitivo de las personas mayores, aunque persisten desafíos en la adecuación de las pensiones mínimas al coste real de los cuidados especializados.
Calendario de aplicación
Las nuevas cuantías se harán efectivas en la nómina de enero de 2026, que percibirán los pensionistas a principios de febrero. La Seguridad Social remitirá comunicaciones individualizadas informando del importe exacto de cada prestación según las circunstancias personales de cada beneficiario.
Los 13 millones de pensiones afectadas incluyen jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y prestaciones en favor de familiares, tanto del sistema contributivo como del no contributivo y de clases pasivas.
Contexto de la medida
Esta revalorización se enmarca en el sistema de actualización automática que garantiza el mantenimiento del poder adquisitivo de los pensionistas. A diferencia de años anteriores con inflación más elevada (8,5% en 2023 o 3,8% en 2024), el incremento de 2026 refleja la moderación de los precios experimentada durante el último año.
El refuerzo adicional para pensiones mínimas y no contributivas responde al compromiso del Gobierno de proteger especialmente a los colectivos con menores ingresos, una prioridad en el ámbito de la política social dirigida a las personas mayores.
