ASHO, compañía especializada en codificación clínica y soluciones tecnológicas para el ámbito sanitario, y la Fundación para la Investigación, Docencia e Innovación en Seguridad del Paciente (FIDISP), desarrollarán conjuntamente una herramienta de inteligencia artificial capaz de detectar riesgos en la seguridad del paciente a partir de los historiales clínicos.

El proyecto, que se encuentra en fase inicial, se centra en analizar de forma automatizada mediante IA determinados indicadores o «triggers» que puedan alertar sobre posibles problemas clínicos, con especial atención a incompatibilidades farmacológicas o errores de medicación que puedan comprometer la salud del paciente.

ASHO y FIDISP desarrolla una solución basada en IA para detectar alertas clínicas relacionadas con la medicación


El objetivo es que el sistema detecte si un paciente ha recibido fármacos incompatibles entre sí, o si la administración de un medicamento concreto puede estar asociada a una condición de riesgo. Uno de los casos ya contemplados es el uso de protamina, un fármaco que podría indicar una sobredosis previa de Heparina, lo que constituiría un evento adverso relacionado con la seguridad del paciente.

“El objetivo es desarrollar una herramienta capaz de identificar, de forma automática, cualquier riesgo o contraindicación que pueda poner en peligro la seguridad del paciente a partir del análisis de su historial clínico”, explican desde el departamento de IA de ASHO.

Para ello, el proyecto combinará técnicas de procesamiento de lenguaje natural y machine learning con el objetivo de leer y comprender los textos libres de los expedientes médicos, buscando señales de alerta que puedan pasar desapercibidas en una revisión humana.

La alianza con FIDISP, referente en investigación y formación sobre seguridad del paciente, garantiza una base científica sólida para orientar el desarrollo del proyecto hacia las necesidades reales de los profesionales sanitarios y los entornos clínicos. “Este tipo de soluciones permitirán al sistema sanitario ser más proactivo, detectando patrones de riesgo antes de que se produzca un incidente”, destacan desde ASHO.

Este desarrollo forma parte de la estrategia de ASHO para incorporar la inteligencia artificial en la mejora de los procesos asistenciales, complementando su porfolio de herramientas propias como ASHOINDEX o ASHOCOODE, ya implantadas en numerosos centros hospitalarios.

Y aunque por el momento el proyecto está centrado en detectar problemas relacionados con la medicación, el objetivo a medio plazo es ampliar su alcance a todo tipo de indicadores clínicos relevantes.