Un artículo de la consultora Mimo Online

En las demencias, las manifestaciones cognitivas y funcionales son predecibles, pero en cambio, los síntomas psicológicos y conductuales (SPCD) son variables y pueden aparecer en cualquier momento de la enfermedad. Estos síntomas producen en el paciente y sus cuidadores gran sufrimiento, empeoran el deterioro cognitivo y adelantan la institucionalización.
geriatricarea Síntomas psicológicos y conductuales en las demenciasLos síntomas psicológicos, más complejos y los conductuales, más básicos son imprescindibles en el manejo clínico de las demencias. Su tratamiento repercutirá directamente en la calidad de vida y bienestar de los implicados.
El origen de estos síntomas se encuentra en la interacción de factores psicológicos, sociales, biológicos y ambientales.
Síntomas psciológicos y conductuales de las demencias
Algunos de los SPCD principales son:

  • Alteración del pensamiento. Creencias o narraciones erróneas o falsas (por ej. le roban aquello que no encuentra).
  • Ilusiones y alucinaciones. Percepciones distorsionadas o falsas.
  • Agresividad. Conducta física o verbal que causa daño físico o moral.
  • Depresión.
  • Ansiedad.
  • Euforia.
  • Apatía.
  • Desinhibición.
  • Irritabilidad.
  • Hiperactividad motora. Aumento de la deambulación o de otra actividad motora.
  • Vocalizaciones repetidas.
  • Alteración del sueño.
  • Aumento o disminución del apetito.

Prevención de los SPCD
Como ocurre en todas las enfermedades crónicas, la prevención gira en torno a un plan de cuidados, desde una perspectiva médica y psicosocial que implique a los profesionales, el paciente y sus cuidadores. Los aspectos fundamentales de este plan de cuidados son:

  • Diagnóstico temprano.
  • Tratamiento farmacológico.
  • Control de la comorbilidad.
  • Prevención y tratamiento de los síntomas psicológicos y conductuales.
  • Asesoramiento y apoyo continuo al paciente y cuidadores.

Manejo de los SPCD
El manejo inicial de los síntomas psicológicos y conductuales de las demencias “ha de basarse en la comprensión del proceso biológico que produce la demencia, la asunción de la perspectiva personal del paciente, la búsqueda y modificación de posibles factores desencadenantes y una actitud que permita recobrar la confianza y la sensación de control”.
Debe explicarse al cuidador que se da prioridad al bienestar del paciente, por lo que se intenta disminuir la frecuencia e intensidad de los síntomas en lugar, en la mayoría de los casos, de eliminarlos cuando no es posible.
Los tratamientos son farmacológicos (antidepresivos, benzodiacepinas, neurolépticos, etc.) y no farmacológicos (estimulación cognitiva grupal, intervención conductual, entrenamiento del cuidador, psicoeducación,etc.).
“La satisfacción de las necesidades básicas, el control de los procesos médicos intercurrentes, la progresiva adaptación del entorno, el uso de fármacos específicos para la demencia, la formación del cuidador, y el asesoramiento y apoyo continuo al paciente y al cuidador son las herramientas más poderosas para evitar la aparición de los SPCD”.
Fuente: “Síntomas psicológicos y conductuales de la demencia: prevención, diagnóstico y tratamiento” Javier Olazarán-Rodríguez, Luis F. Agüera-Ortiz, Rubén Muñiz-Schwochert.  Rev Neurol 2012; 55: 598-608.