/p>Un elevado porcentaje de personas mayores, nada menos que el 60%, tiene Hiporexia, o disminución del apetito, según datos recogidos por Puente Real Servicios Residenciales para Mayores. Si la falta absoluta de apetito, que se conoce como anorexia, afecta sobre todo a personas jóvenes, la Hiporexia se da cada vez más en los mayores.
geriatricarea Hiporexia
Seis de cada diez personas mayores tiene Hiporexia o disminución del apetito

Esta falta de interés por comer es un síntoma con serias consecuencias que afecta a un porcentaje muy elevado de la población mayor española.
Este problema se agrava por dos motivos: la edad y la enfermedad. Los mayores suelen comer poco, porque sus necesidades físicas no son como las de antes, sin embargo, hay otras causas que pueden estar detrás de éstas y si se desconocen o no se descubren, la persona puede empezar a perder peso y, con el tiempo, acaba desnutriéndose.
Los especialistas de Puente Real Servicios Residenciales para Mayores señalan que la Hiporexia “es un síntoma que el profesional ha de analizar para conocer las causas que llevan al mayor a perder el apetito. El cambio en la medicación es un ejemplo de causa fisiológica, pero es labor nuestra desarrollar protocolos de detección de los principales indicadores, porque existen otras causas como patologías más severas e incluso factores psicológicos que también pueden provocarla”.
Otro de los problemas de esta enfermedad es qué se esconde bajo la “normalidad”. Y es que como los mayores suelen comer poco, ya que su cuerpo ya no necesita ingerir tantos alimentos, los familiares ven normal que no tengan hambre a determinadas horas, como por ejemplo en la cena, que acaban comiendo una pieza de fruta o toman un vaso de leche.
En este sentido, es necesario que los profesionales acompañen al mayor en sus comidas para evaluar si está comiendo adecuadamente o por el contrario deja la comida en el plato o la sustituye por otros alimentos que pueden llegar a perjudicar su salud.