El servicio público de teleasistencia avanzada betiON del Gobierno Vasco ha iniciado la segunda fase de su proyecto piloto de adaptación del servicio a las personas con deterioro cognitivo, demencias o Alzheimer y a sus familiares. El objetivo es testear soluciones tecnológicas que ayuden a mejorar la calidad de vida de personas con deterioro cognitivo, así como facilitar la tarea de cuidados y de descanso de las personas que las cuidan.

Son 17 las familias que forman parte de este programa piloto de teleasistencia avanzada. Actualmente betiON se encuentra testeando la viabilidad de colocar varios dispositivos que permitan abordar algunas características comunes entre estas personas con deterioro cognitivo, como la desorientación, la deambulación o los riesgos de caída. Durante un año, estas familias evaluarán la efectividad y aceptación de estas soluciones tecnológicas, con el objetivo de poder extender el proyecto a todas las familias que así lo requieran en el futuro.

La particularidad reside en que todos estos dispositivos estarán conectados al centro de atención de betiON, como el resto de la tecnología de la teleasistencia avanzada de Euskadi. Las y los profesionales serán quienes reciban las alertas, verifiquen su gravedad y movilicen contactos y/o recursos en función de los protocolos establecidos para ello.

El servicio público de teleasistencia avanzada betiON impulsa un programa piloto para adaptar su servicio a las personas con deterioro cognitivo y sus familiares

En concreto, betiON explora ya tecnología en el mercado referente a dispositivos de teleasistencia que permitan responder rápidamente a una situación de desorientación que puede conllevar que la persona con deterioro cognitiva se pierda. Un dispositivo tecnológico que pueda ofrecer respiro y tranquilidad a las personas cuidadoras mediante un pequeño geolocalizador que se pueda incorporar a objetos de la vida cotidiana de la persona afectada (como llevarlo cosido a un bolsillo, dentro de una cartera, en forma de llavero, etc.) de manera que no sea un objeto extraño para ella.

Este dispositivo permitiría tener localizada a la persona siempre y cuando lo lleve encima, de manera que, si una persona cuidadora se alerta, puede contactar con el servicio de teleasistencia para que le asegure la localización exacta en tiempo real del geolocalizador. Estos dispositivos también disponen de funcionalidades que pudieran ser útiles: como la opción de establecer zonas seguras e inseguras (una salida de la limitación generaría una alerta) o alertas de velocidad (si se supera una velocidad determinada puede indicar que la persona ha subido a un medio de transporte, por ejemplo).

Otro de los síntomas comunes de las demencias y que produce mucha intranquilidad en sus cuidadores/as es la deambulación o vagabundeo. Esta conducta es resultado de la inquietud motora y la persona afectada necesita caminar para disminuir su inquietud. Esta conducta no supone peligro si la persona afectada se encuentra acompañada o lo hace por una zona segura. Por este motivo, betiON está explorando soluciones alternativas tecnológicas que alerten si una persona sale del domicilio por la noche, por ejemplo, sin supervisión.

Del mismo modo, y ante los problemas de movilidad y riesgo de caída dentro del domicilio, la tecnología que se está explorando corresponde a detectores que perciban cambio de presión, tanto en modalidad de cama como de sofá, de manera que si la persona afectada se levanta pueda generar una alarma en el domicilio y alertar a la persona cuidadora.

Se trata de un proyecto pionero de teleasistencia avanzada que, tal y como indica Beatriz Artolazabal, consejera de Igualdad del Gobierno Vasco, surge con el objetivo de “aumentar los apoyos a estas personas para mejorar así su calidad de vida”. De hecho, es la primera vez en el Estado que se adapta el servicio de teleasistencia a las personas con deterioro cognitivo y/o demencia que, habitualmente quedan fuera de este servicio.

Para hacer posible este proyecto, el Gobierno Vasco cuenta con la colaboración de las asociaciones de familiares y amigos de personas con Alzheimer y otras demencias de Euskadi: Afaraba, AFAGI y AFA Bizkaia, enmarcadas en la Federación Alzheimer Euskadi, que han ofrecido asesoramiento y formación a las y los profesionales de betiON en pautas de comunicación telefónicas y presenciales para personas con deterioro cognitivo. El proyecto cuenta también con la coordinación de H-Enea y la colaboración de Iñaki Artaza, presidente de la Fundación Envejecimiento y salud de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología y Director Médico de IMQ.

La consejera de Igualdad del Gobierno Vasco insiste en que la colaboración con las asociaciones de enfermos de Alzheimer y familiares de los tres Territorios Históricos “ha sido clave para determinar qué necesidades tienen las personas cuidadoras y será clave para evaluar el impacto que tiene la tecnología en sus vidas”.

Adaptación del servicio y la tecnología de base

En una primera fase, concluida en septiembre y en la que participaron las mismas familias, ya se adaptó la respuesta del servicio y la tecnología de base. BetiON hizo algunas modificaciones para atender de una manera más personalizada a las personas con deterioro cognitivo y/o demencia. Estas adaptaciones incluyen la definición de un sistema de alertas extraordinario que permite detectar situaciones de demencia, así como un sistema de familiarización para entrenar el uso de la teleasistencia avanzada: con colocación de carteles en las diferentes estancias del hogar, con un calendario de ensayos e incluso adaptando el sonido del terminal, para disminuir la posible aparición de delirios por la aparición de una voz desconocida.

También se modificó la visita al domicilio por parte de las y los profesionales: contando siempre con la presencia de algún familiar de referencia y tomando datos, lo que se conoce como una ‘historia de vida’ de la persona usuaria. Una especie de ficha personal que incluye intereses y aficiones clave de la persona, para impulsar así una personalización de los contactos telefónicos que pueda servir para aminorar una situación de agitación o desasosiego.

En cuanto a los dispositivos, se colocaron 20 dispositivos en los hogares de las personas participantes en el proyecto piloto: 12 detectores de humo o fuego; 6 detectores de gas; un detector de caídas (Vibby) y un detector de movilidad. Según destacan desde betiON, las personas participantes y sus familias calificaron de “muy positiva” la adaptación, siendo la atención y el seguimiento realizados lo mejor valorado. En general, los familiares valoraron la tranquilidad y seguridad que les proporciona la teleasistencia avanzada.

Esta experiencia ha servido asimismo para valorar que todas las personas con algún tipo deterioro cognitivo pueden ser beneficiarias de este sistema, siempre que vivan acompañadas; y que para aquellas personas que vivan solas, es efectiva cuando el deterioro cognitivo se encuentra en un estadio inicial.

La intención del Gobierno Vasco es extender el servicio BetiON a todas las personas mayores de 80 años en esta legislatura, para, con ello, contribuir a que “las personas puedan seguir desarrollando su proyecto de vida de manera autónoma el mayor tiempo posible y en su domicilio, como ellos desean”, señala Beatriz Artolazabal, destacando que hacerlo posible supondrá, “un soporte fundamental, que da tranquilidad, no solo a las personas mayores, sino también a sus familiares”.

betiON se dirige a personas mayores de 75 años que viven solas, a personas mayores de 65 que se encuentran en situación de dependencia o de vulnerabilidad reconocidas por los servicios sociales, a personas con discapacidad intelectual, física o sensorial y dependencia reconocida en cualquiera de sus grados, así como a personas que padecen una enfermedad mental diagnosticada y presenten una situación de dependencia reconocida o riesgo de exclusión social.