Contar con mayor inversión en innovación terapéutica y tecnológica en sistemas de vigilancia y seguimiento ante la resistencia a los antimicrobianos, y mejorar de los sistemas de información con sistemas de ‘machine learning‘ y ‘deep learning’, es clave para el abordaje de posibles pandemias futuras, tal y como se expuso en la tercera edición del ‘Health Innovation Forum‘.

En este encuentro dirigido a profesionales sanitarios, organizado por la compañía biomédica MSD, con el aval de la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA) y la Fundación Española de Calidad Asistencial (FECA), se puso de relieve que la resistencia a los antimicrobianos se ha agravado en los últimos años y, por ello, los expertos remarcan la importancia de recuperar y reactivar en las agendas el abordaje de este reto sanitario.

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La comunidad científica pide reforzar los sistemas de vigilancia y seguimiento ante la resistencia a los antimicrobianos

En este sentido, el Dr. Rafael Cantón, jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Universitario Ramón y Cajal, incidió en su participación en este foro en que «se ha demostrado que la interrupción de los programas de optimización de uso de antimicrobianos (PROA) han tenido como consecuencia un mayor consumo de antimicrobianos y aumento de las tasas de resistencia en numerosos hospitales», y por ello «se deben reforzar los sistemas de vigilancia y seguimiento».      

En este sentido, este experto advierte que «con independencia de la innovación terapéutica necesaria para atajar el problema de las resistencias, el uso adecuado de los antimicrobianos y, con ello, la disminución de la presión como motor de la emergencia y selección de las poblaciones resistentes, se han mostrado eficaces en la reducción de las resistencias».

Por lo que respecta a los aspectos que podrían ayudar al control de este reto sanitario, el jefe del Servicio de Microbiología del Hospital Universitario Ramón y Cajal destaca el refuerzo en la formación de los profesionales y el desarrollo de planes específicos para situaciones de pandemia, como ha ocurrido con la ocasionada por el SARS-CoV-2. Una mayor inversión en innovación terapéutica y tecnológica y la mejora de los sistemas de información a través de sistemas ‘machine learning‘ y ‘deep learning’ son algunas de las recomendaciones ofrecidas por este experto, quien también recalca la necesidad de «evitar la ralentización del acceso a nuevos fármacos (antimicrobianos) al mercado por posible colapso de las agencias reguladoras».

La Covid-19 revela la amenaza real de los microorganismos

En el marco de la tercera edición del ‘Health Innovation Forum’, el Dr. Bruno González-Zorn, catedrático en Sanidad Animal y director de la ‘Antimicrobial Resistance‘ en la Universidad Complutense de Madrid, hizo hincapié alguna de las claves en el abordaje de esta problemática que, solo en 2015, causó la muerte de más de 30.000 personas en Europa.

Para el Dr. González-Zorn, asesor de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en resistencia a antibióticos desde la perspectiva ‘One Health‘, la Covid-19 ha supuesto un punto de inflexión, ya que «esta pandemia ha abierto los ojos de la sociedad civil y profesional, frente a la amenaza real de microorganismos, así como de la interacción seres humanos-ambiente y animales. Debemos aprovechar este momento para afianzar el concepto ‘One Health’ -en el que la salud se interpreta como un todo compuesto por salud humana, salud animal y salud medioambiental- a todos los niveles, ya que no es el futuro, sino que es el presente».

Otra de las temáticas abordadas en esta edición de este foro fue la gestión basada en el valor. Al respecto, la Dra. Inmaculada Mediavilla, presidenta de la Sociedad Española de Calidad Asistencial (SECA), señaló que a través de ella «se orienta a todo el sistema sanitario alrededor del valor que es percibido por el paciente cuando recibe nuestros servicios». Y para ello, el primer paso es «gestionar los servicios en torno a sus necesidades, las cosas que le importan (como la accesibilidad, no tener que desplazarse, no hacerle procedimientos y técnicas innecesarias, conservar la funcionalidad, mantener su calidad de vida, etc.), y también considerándolo agente activo y partícipe de su propia salud».

Además, la presidenta de la SECA recalcó la importancia de la medición de resultados porque «lo que no se mide no se puede mejorar». En este sentido, añade que «la medición de resultados conlleva mejoras en valor para todas las partes. Y para ello es preciso definir qué indicadores son relevantes y cómo recogerlos. Su evaluación y monitorización debe permitir tomar decisiones basadas en valor y posibilitar la introducción de medidas que ayuden a la optimización del funcionamiento del sistema sanitario».