/p>Consciente de que el agua es un recurso limitado y que su uso debe ser racional, Grupo Sanyres ha puesto en marcha una campaña de concienciación para promover el buen uso del agua y recordar, tanto a los residentes como a sus familiares y empleados, que se debe hacer un consumo moderado para ahorrar este bien natural.
Geriatricarea Cuidar el agua es un reto de todos Sanyres
Esta iniciativa trata de promover el buen uso del agua entre residentes, familiares y empleados de Sanyres

Con este objetivo, bajo el lema “Cuidar el agua es un reto de todosSanyres ha elaborado una imagen específica y ha realizado cartelería para distribuir tanto en las zonas comunes como en las áreas privadas de los residentes y también en los espacios destinados a los empleados, con mensajes del tipo cierra el grifo cuando no lo utilices; dúchate en lugar de bañarte; no uses el inodoro como papelera; repara los grifos si detectas pérdidas; utiliza cisternas de doble carga; o avísanos si detectas una fuga. En cada uno de ellos se indica la cantidad de agua que se ahorraría si se llevasen a la práctica indicada.
Por otra parte, la campaña marca una serie de normas que Sanyres se compromete a cumplir, y que también muestra el grado de transparencia de esta organización a la hora de comunicar sus políticas de gestión.
Así, entre otras propuestas, se incluye que la empresa se compromete a evaluar el consumo de agua de cada centro; velar por el mantenimiento regular de los equipos sanitarios, especialmente los grifos, urinarios, inodoros e instalaciones como lavandería, cocina y equipos de riego del jardín para evitar el derroche de agua. Asimismo, asegura que sus clientes y personal serán informados sobre las buenas prácticas de gestión adecuada del agua; promoverá la participación del personal y de los residentes en actividades de mejora ambiental del centro; dará a conocer medidas de ahorro de agua de fácil aplicación y que además puedan ser extensibles al entorno de la residencia como familiares de los residentes y trabajadores; se realizará anualmente la contabilidad del consumo de agua en el centro, que incluirá el volumen, ratios significativos, el coste y la evaluación de las medidas adoptadas para conseguir una reducción del consumo de agua.
Y finalmente, se establecerá una política de compra que dé prioridad al ahorro de agua en los usos internos del edificio como los servicios o la cocina, además de en los usos externos como en la ampliación de las zonas ajardinadas y de riego.