El esperado proceso de vacunación contra la Covid-19 es ya una realidad tras administrase ayer las primeras vacunas en España, empezando por uno de los colectivos más vulnerables y necesitados: las personas mayores de las residencias y sus profesionales. Todas las empresas asociadas de Aeste (Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia), y su personal se ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias para agilizar el proceso lo máximo posible.

En todas las Comunidades Autónomas, la vacunación se llevará a cabo en las propias residencias, a excepción de la Comunidad de Madrid, donde las autoridades sanitarias han formado a las residencias que disponen de personal sanitario que puede llevar a cabo este cometido. La vacunación se alargará durante los próximos meses de enero y febrero, en remesas de 50.000 dosis por semana. Ésta contempla, aproximadamente, proteger tanto a los 55.000 mayores de las residencias, como a los 70.000 profesionales que les cuidan y tratan a diario, siempre teniendo en cuenta que su administración es voluntaria.

Araceli Rosario, interna de la residencia Los Olmos de Guadalajara, ha sido la primera persona en recibir la vacuna frente a la Covid-19 en España. Foto: Borja Puig de la Bellacasa

Esta circunstancia hará que, tras la vacunación, las residencias se conviertan en los lugares más seguros para nuestros mayores, incluso más que los propios domicilios. Y es que, la intención del plan es blindar a las residencias ya que sus mayores son el segmento poblacional más vulnerable ante el Coronavirus. Así, tal y como apuntan desde Aeste, los centros geriátricos, tras sufrir uno de los embates más duros de la pandemia, consiguen «darle la vuelta a la situación», dando lugar a una de las primeras burbujas sociales protegidas y seguras. Su inmunización se traducirá, previsiblemente, en una drástica reducción de la incidencia del virus en las residencias.

Jesús Cubero, secretario general de Aeste, asociación patronal que agrupa a los grandes operadores privados de servicios residenciales, teleasistencia y de ayuda a domicilio de nuestro país, ha asegurado que, “la llegada de la vacuna supone que nuestros mayores se verán libres, por fin, de este maldito virus. Tras todos estos meses de sufrimiento y de espera, por fin vamos a tener un regalo de reyes anticipado. Un regalo que aportará normalidad, tranquilidad y seguridad a los mayores que habitan en nuestras residencias”.

Empieza así la primera de las tres etapas establecidas en la Estrategia nacional de vacunación, en la cual los cuatros grupos priorizados son: los residentes y personal sanitario y sociosanitario en residencias de personas mayores y con discapacidad; el personal sanitario de primera línea; otro personal sanitario y sociosanitario y grandes dependientes no institucionalizados. La vacuna se incorporará al calendario de vacunación español y será voluntaria, gratuita y administrada a través del Sistema Nacional de Salud.