La Federación Castellano y Leonesa de Atención a la Dependencia (Acalerte) ha mostrado su satisfacción por la decisión de la Junta de Castilla y León de flexibilizar el ingreso de usuarios en residencias.

Se trata de una medida calificada desde Acalerte como “muy necesaria” para todas las personas usuarias que estaban a la espera de recibir los servicios y que ahora puede realizarse de una manera “normalizada”, teniendo en cuenta todas las precauciones de la Covid. Y es que, tal y como señala Diego Juez, presidente de esta organización, “desde que se comprobó la efectividad de la vacunación y el descenso de contagios y sobre todo, el hecho de no tener que lamentar la pérdida de más personas por la Covid, pedimos esta medida ya que así nos lo solicitaban los familiares y futuros usuarios que estaban a la espera de la plaza”.

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Acalerte se muestra satisfecha con la decisión de la Junta de flexibilizar el ingreso de usuarios en residencias

De hecho, según el Ministerio de Sanidad los resultados de los estudios de efectividad de la vacunación con vacunas de ARNm en las personas institucionalizadas en residencias de mayores muestran muy buenos resultados de protección frente a la infección, la hospitalización y muerte. En concreto, el riesgo de infección en esta población se redujo en un 57,2% a los 14 días tras la vacunación con una dosis, y un 81,2% tras la segunda dosis. Además, se observa protección indirecta en las personas no vacunadas que viven en residencias con alta tasa de vacunación.

Hay que recordar que desde hace más de un año los centros están cerrados a ingresos normalizados y abiertos a salidas y visitas. En lo que va de año, según las propias informaciones de la Junta de Castilla y León, durante los meses de febrero y marzo se han registrado 500 nuevos ingresos de residentes por razones de “urgencia social”.

Actualmente en Castilla y León existe en 48.296 plazas en centros residenciales, de las cuales, 6.946 están vacantes según los datos registrados por la propia Junta de Castilla y León. Una situación que tiene al sector en un lugar de preocupación ya que, en el caso concreto de las residencias, centros de día y atención domiciliaria, por cada persona que se atiende se están creando 1,2 puestos de trabajo y la dificultad para poder acceder a una plaza libre que existe actualmente son empleos cualificados, altamente feminizados y no deslocalizables que se ponen en peligro.

Por ello desde Acalerte recalcan que “son necesarias políticas sociales integrales que tengan en cuenta la Dependencia y que no nos hagan pensar en que la Administración es la que tiene que solucionarnos este problema cuando llega”. Además, esta patronal, la mayor organización de representación de empresarial de Atención a la Dependencia en la región, recuerda que el sector de la Dependencia no implica gasto sino inversión, ya que “por cada euro que se dedica, 0,50 vuelve a las arcas del Estado en cotizaciones a la Seguridad Social, impuestos, etc.”.