Amavir ha participado en la 7ª edición de la Jornada en Atención Centrada en la Persona de ACRA (Asociación Catalana de Recursos Asistenciales), donde la directora de la residencia Amavir San Cugat del Vallès, Maite Aragón, ha presentado su modelo de atención residencial «Guiados por ti».

El modelo de atención supone una apuesta por dar visibilidad y empoderar a la persona mayor, acondicionando el entorno según sus indicaciones directas o indirectas, para que sienta la residencia como su propia casa. De esta forma, se consigue que la persona sea el centro de atención; quien debe indicar, informar, orientar y guiar la forma en la que quiere recibir sus cuidados. Todo ello, con el objetivo final de evitar una ruptura en el trayecto vital del residente, ofreciendo continuidad y favoreciendo todo a lo que da valor, colocando al usuario como elector de su atención.

Y para ello, se incluye a la familia en el día a día de la residencia, haciéndoles partícipes del nuevo modelo de intervención. Así, se consigue que los familiares confíen en esta forma de trabajar, dotándoles de información sobre el proceso de la enfermedad y aportando el apoyo emocional necesario.

El modelo “Guiados por ti” de Amavir establece el cuidado de los residentes en cuatro dimensiones diferenciadas:

• dimensión física, facilitando la posición natural, cuidados de la piel, cambios posturales e higiene…
• dimensión psicoespiritual, respetando las creencias de cada usuario, favoreciendo la autoestima y respetando el significado de la vida de cada persona
• dimensión ambiental, aportando a cada residente una habitación que cuente con la temperatura adecuada, evitando ruidos y tratando de estimular con factores cercanos a la historia de la vida de la persona residente (como música, imágenes…)
• relaciones interpersonales y familiares, evitando horarios y protocolos innecesarios

Además, el modelo “Guiados por ti” cambia el comportamiento de los profesionales y la organización de su trabajo para centrar su labor en la experiencia personal de forma bidireccional. Por una parte, el cuidador se convierte en acompañante, lo que genera el sentimiento de realización profesional, y por otro lado, el residente se siente útil y responsable de su cuidado.

Con todo ello se pretende “acompañar a todas las personas que nos eligen para dar continuidad a su proyecto vital poniendo el foco en alcanzar la máxima calidad de atención, garantizando derechos y respetando preferencias así como las necesidades que más despiertan interés en los usuarios”, indica Maite Aragón, directora de la residencia Amavir San Cugat del Vallès.