Un artículo de GenesisCare, compañía especializada en tratamientos oncológicos

El 61% de los nuevos diagnósticos de cáncer en España se presenta en personas mayores de 65 años (1), un sector más vulnerable ante las enfermedades que requiere de más cuidados y que a su vez, conforman un grupo de riesgo ante la aparición de enfermedades como el cáncer relacionadas con la edad. Todo ello, hace necesario extremar el cuidado de los más mayores para garantizar su salud y bienestar, y poder asegurarles una mejor calidad de vida.

Entre los expertos que conforman el equipo de GenesisCare se encuentran los profesionales de Enfermería Oncológica quienes atienden, entre sus muchos pacientes, a esta población de riesgo. Esta es la función de Gloria Campillo, coordinadora de Enfermería, quien desde hace más de 20 años se dedica al cuidado y la atención de aquellas personas que padecen cáncer y necesitan, además de sus tratamientos, ser atendidos de manera más cercana. Es por ello, que en el día a día de la consulta de enfermería el equipo de enfermería informa al paciente de todo el proceso que se va a llevar a cabo y elabora un plan de cuidados personalizado para conseguir que el tratamiento de radioterapia y/o quimioterapia sea lo más eficaz y confortable para el enfermo.

“Es muy importante, ahora más que nunca, atender de manera personalizada a los pacientes que acuden a nuestras consultas y que llegan repletos de dudas. Para nosotros, lo primordial es atender a estas personas de riesgo que sufren mucho a nivel psicológico, por lo que nuestros esfuerzos están centrados en mantener su tranquilidad y el mejor servicio, y por supuesto, en administrarles los tratamientos con la mayor normalidad”, explica Gloria Campillo. Se trata de un acompañamiento durante toda la enfermedad del paciente ya que, además de administrarle el tratamiento de quimioterapia o atenderle durante la radioterapia, una vez finalizado el tratamiento oncológico, los profesionales enfermeros se encargan también de dar de alta a los pacientes y aconsejarles sobre cómo tendrán que cuidarse.

Más d ela mitad de los nuevos diagnósticos de cáncer en España se presenta en personas mayores de 65 años

Respecto a la incertidumbre vivida como consecuencia de la Covid-19, en GenesisCare se han continuado todos los tratamientos oncológicos garantizado la seguridad tanto de pacientes como de los empleados. “Nosotros hemos continuado trabajando tanto en oncología médica como en oncología radioterápica. Aunque es cierto que hubo momentos en los que recibimos menos pacientes porque se habían pospuesto sus operaciones, en ningún momento se ha bajado la actividad”, señala la enfermera Campillo. Además, añade que su objetivo es poder garantizar el mejor tratamiento y la mejor calidad de vida a todos los pacientes “actualmente en uno de nuestros centros en Madrid estamos atendiendo a un paciente de 92 años que está recibiendo un tratamiento de quimioterapia, que le ayuda a controlar el dolor y mejorar su estado general, consiguiendo una mejor calidad de vida”.

Tratamientos de patologías no oncológicos, centrados en las personas mayores

Además de la radioterapia aplicada en tratamientos oncológicos, este compañía emplean los tratamientos radioterápicos a baja dosis como tratamiento para patologías benignas, una muy buena alternativa para las personas mayores que padecen artrosis u otras muchas patologías como la fascitis plantar, queloides o la enfermedad de Dupuytren. Gracias a estos tratamientos, los pacientes más vulnerables pueden someterse a sesiones de radiación de baja dosis para mejorar el dolor provocado, por ejemplo, por la artrosis y mejorar de manera sustancial la calidad de vida de esta tipología de pacientes

La radioterapia no oncológica administra la décima parte de la dosis utilizada en tratamientos oncológicos, y supone la mejora del dolor articular en hasta un 90% en los pacientes tratados. Esto se debe a las propiedades antiinflamatorias y antiproliferativas de este tratamiento, que, aplicado a baja dosis, permite aliviar el dolor, la inflamación y el deterioro de la funcionalidad de forma cómoda, poco invasiva, indolora para el paciente y con una toxicidad casi inexistente.

(1) Datos extraídos del Observatorio del Cáncer, lanzado por la Asociación Española contra el Cáncer (AECC).