La Covid-19 está dejando como una secuela importante la falta del sentido del olfato, uno de los sistemas sensoriales más complejos y es el menos considerado por muchas personas. Y su pérdida afecta a toda la esfera de la participación ocupacional de la persona, advierten desde Grupo 5.

Las alteraciones que puede sufrir el olfato son diversas, al igual que las enfermedades que pueden causarlas, y en el caso de la pérdida del olfato hay que tener en cuenta que existe una recuperación espontánea importante, ya que las células olfatorias tienen capacidad de regenerarse en 45/60 días. No obstante, hay personas que pasado este tiempo no tienen una recuperación completa, o presentan alteraciones o pérdidas parciales del olfato, para las que es importante recibir tratamiento.

El tratamiento de neurorrehabilitación es clave en muchos casos para recuperar el olfato tras sufrir la Covid-19

La mayoría de pacientes diagnosticados con Covid-19 con sintomatología leve-moderada presentan alteraciones de olfato y gusto, según ha podido comprobarse en el primer estudio realizado hasta el momento en cuatro países europeos (España, Francia, Bélgica e Italia) con cerca de 500 pacientes. En concreto se ha observado que cerca del 80% de ellos refiere una pérdida total del olfato y el 88% tiene dificultades para identificar sabores como el dulce, salado o amargo.

El tratamiento de la falta del olfato (anosmia) requiere de una valoración global del paciente. Cuánto, cómo y por qué le afecta la pérdida de olfato en todas las áreas de la vida de la persona, creando así una línea base de tratamiento individualizada que marque los objetivos específicos de cada persona. En este sentido, Grupo 5 CIAN analiza varios estímulos olfatorios desde los más relacionados a su vida diaria, así como algunos que no lo estén, recreando hasta 88 tipos diferentes de olores y que faciliten la estimulación olfativa. Además, también se evalúan aquellas sustancias más nocivas.

Tal y como destaca Marta Ramírez, Terapeuta Ocupacional de Grupo 5, «la tasa de recuperación del olfato es bastante elevada, todo depende del grado de implicación del paciente tanto en las sesiones ambulatorias como en los ejercicios en su propio domicilio, es un proceso largo, pero con resultados palpables tras el transcurso de algunas semanas. En nuestra rehabilitación intentamos que el paciente pueda ir recordando y asociando olores, de forma similar a la que se enfrenta un enólogo en una cata ciega de vinos».

Este tratamiento para la recuperación del olfato forma parte del programa de tratamiento integral post Covid-19 que Grupo 5 CIAN ha implementado en sus centros especializados en neurorrehabilitación de Madrid y Navarra, regiones con un alto número de pacientes con secuelas por la pandemia. Y es que la enfermedad causada por coronavirus conlleva en muchos casos diferentes tipos de secuelas, algunas visibles y otras totalmente invisibles, tanto para las personas que han pasado un periodo prolongado en cuidados intensivos, como para las que no han sido ingresadas.