Con el objetivo de promover la formación en Alzheimer de familiares y/o cuidadores y concienciar sobre la importancia de una adecuada nutrición en el abordaje de esta enfermedad, Nutricia y la Confederación Española de Alzheimer (CEAFA) han firmado un acuerdo de colaboración.

Hasta hace poco tiempo la nutrición sólo se planteaba como mantenimiento en las últimas fases del Alzheimer. Sin embargo, en las últimas dos décadas se ha empezado a considerar la influencia de la nutrición en todas las fases del Alzheimer, de manera que, según los expertos, la alimentación adecuada y el soporte nutricional pueden prevenir la situación de fragilidad cognitiva en pacientes con Alzheimer en fases tempranas, si lo combinamos con ejercicio físico y entrenamiento cognitivo. En este sentido, numerosos estudios revelan que el papel de la nutrición es clave para abordar funciones como la velocidad de la marcha, o la sarcopenia (pérdida de masa muscular y fuerza), signos incipientes de Alzheimer preclínico, es decir, sin clínica cognitiva aparente.

Geriatricarea nutrición y Alzheimer
Una alimentación y soporte nutricional adecuado pueden prevenir la situación de fragilidad cognitiva en pacientes con Alzheimer en fases tempranas

Y es que existe una relación de retroalimentación entre la nutrición y la fragilidad cognitiva, ya que cada una de ellas repercute sobre la otra respectivamente, lo que permite que se pueda intervenir en el curso inicial de la enfermedad. En este terreno, la nutrición, el ejercicio físico y el entrenamiento cognitivo han demostrado su eficacia, sobre todo cuando se interviene de forma precoz.

Tal y como destaca el Dr. Manuel Antón, Geriatra en el Complejo Hospitalario Universitario de Cáceres, “se ha demostrado que dietas, como la dieta mediterránea, ricas en vegetales y aceite de oliva aportan beneficios cuantificables a nivel cognitivo. Otro importante hito en el abordaje nutricional en el curso de la enfermedad es la intervención en la génesis de la enfermedad del Alzheimer, con la intervención de preparados dietéticos específicos en los componentes de la cognición, como Souvenaid. En este sentido, se ha demostrado beneficios en test de memoria pero sobre todo en la influencia bidireccional entre función y cognición con mejoría en test funcionales, con correspondencia con la neuroimagen y además manteniendo la eficacia en estudios a 3 años”.

Tradicionalmente se había involucrado de forma paralela los buenos hábitos de vida al envejecimiento saludable. En la actualidad, la comunidad médica ha empezado a considerar el concepto de envejecimiento no inherente a la edad que es irreversible, sino al concepto de fragilidad, de vulnerabilidad, que involucra científicamente determinados parámetros medibles “y, además y más importante, que es un concepto dinámico, bidireccional y sobre todo reversible del envejecer, sobre el que podemos actuar”, explica el Dr. Manuel Antón. “En este terreno, la nutrición, el ejercicio físico y el entrenamiento cognitivo han demostrado su eficacia sobre todo cuando más precozmente se interviene”, añade.

La importancia de una adecuada nutrición en el abordaje del alzheimer

Con el objetivo de apoyar y facilitar una mejor gestión de la atención integral de estos pacientes y de sus familias, Nutricia y CEAFA han firmado un acuerdo de colaboración para poner en valor la nutrición durante todas las fases del Alzheimer a través de este ciclo de formaciones denominado Aliados en el Alzheimer.

Este curso está siendo impartido por expertos nacionales de reconocido prestigio. Se trata de un plan de contenidos que contribuya a garantizar la mejor atención integral de estos pacientes. Los próximos contenidos del ciclo de formaciones contemplarán: la actualización de terapias farmacológicas y no farmacológicas, el papel de la investigación en DCL o recomendaciones para el propio cuidador sobre cómo afrontar el día a día en el cuidado de los pacientes.

La actuación de la nutrición multifactorial y multimodal forma parte de la intervención más vanguardista para el abordaje de la enfermedad del Alzheimer y su actuación clínica, tanto cognitiva como conductual desde las fases más iniciales”, concluye el Dr. Manuel Antón.