El 47% de pacientes con Desnutrición Relacionada con la Enfermedad necesitan suplementación nutricional, principalmente en el grupo de edad entre los 75 y 85 años, tal y como indica el ‘Estudio Indico II (Intervención Nutricional mediante la utilización de Dietas Completas Hiperproteicas)‘, elaborado por FontActiv, la gama de suplementos nutricionales para adultos y mayores de Laboratorios Ordesa.

Una de las principales conclusiones de este estudio, realizado para conocer la opinión de los especialistas médicos sobre la desnutrición en el paciente y su tratamiento, así como la importancia del tratamiento nutricional, es la importancia de realizar un cribado nutricional entre las primeras 24 o 48 horas del ingreso para poder detectar y prevenir una posible desnutrición.

Y es que, pese a ser fundamental para prevenir las complicaciones asociadas a la enfermedad y diseñar el soporte nutricional más adecuado, sólo el 35% de los médicos realiza siempre un cribado nutricional de sus pacientes, y el 28% lo realizan de forma ocasional o nunca.

El 47% de los pacientes con Desnutrición Relacionada con la Enfermedad precisa de suplementación nutricional

La suplementación nutricional con dietas completas hiperproteicas o hipercalóricas, formuladas para cubrir las necesidades nutricionales de estos pacientes, que pueden tener requerimientos proteicos y calóricos elevados, puede ser utilizada como única fuente de alimentación en aquellos casos que sea necesario o como complemento a la dieta normal.

Los principales motivos que llevan a los médicos a la recomendación de una suplementación nutricional son la pérdida de peso involuntaria, la limitación de la ingesta de alimentos, por caquexia o sarcopenia, o cuando se detecta que las necesidades nutricionales del paciente son elevadas.

Según los datos recogidos en el Estudio INDICO II de FontActiv, en general, las dietas completas hiperproteicas principalmente se recomiendan en pacientes oncológicos (65%) o en estados hipercatabólicos (42%), ya que consumen mucha energía. También en casos de úlceras por presión (41%), que requieren de muchos nutrientes, calorías y proteínas; para ofrecer una alimentación completa (30%) o para suplementar la dieta habitual (70%). En este caso, es imprescindible tener en cuenta que los suplementos nutricionales son un extra en la alimentación habitual, por lo que no se debe prescindir de comidas o sustituirlas por estos. Otro de los factores que destacan los participantes en el estudio es la alta tolerabilidad y adherencia a los suplementos nutricionales superior al 90% y en el caso de los suplementos con fibra al 77%.

Cabe recordar que la Desnutrición Relacionada con la Enfermedad (DRE) en Europa afecta a 30 millones de personas y supone un coste sanitario de 170.000 millones de euros al año debido a una mayor tasa de reingresos y de estancias hospitalarias prolongadas que puede conllevar.

La desnutrición es un estado de déficit energético, proteico o de otros nutrientes y que puede estar provocada por enfermedades crónicas, el envejecimiento o debido a la recuperación de intervenciones quirúrgicas, entre otras causas. La suplementación nutricional ha resultado ser un aliado para prevenir o paliar estados de desnutrición, contribuyendo a mejorar la salud del paciente y disminuyendo el riesgo de complicaciones.

El tratamiento se deberá basar en un programa de alimentación y/o suplementación adecuado e individualizado, que adapte la cantidad, la fórmula y la forma de tomarlo a la enfermedad, el grado de desnutrición y la cantidad y/o calidad de la dieta habitual.

En la elaboración del Estudio INDICO II han participado unos 150 profesionales de la salud, entre ellos especialistas en endocrinología, geriatría y medicina interna, que han realizado un seguimiento a más de 500 pacientes de un total de más de 2.000 pacientes que habían sido tratados con suplementos nutricionales.