Con el objetivo de ofrecer una formación más personalizada a usuarios con ciertas dependencias o limitaciones funcionales, como es el colectivo de las personas mayores y personas en situación de vulnerabilidad en general, se ha puesto en marcha el proyecto VIRTUALIZA, una iniciativa para desarrolla de un innovador espacio de formación virtual y multiusuario.
Gracias a este espacio de formación el personal formador podrá impartir sesiones académicas a alumnos ubicados en diferentes localizaciones que podrán interactuar con el docente y entre sí, en tiempo real, gracias a la creación de un escenario virtual mediante el uso de gafas de Realidad Virtual, a través de la representación de los usuarios en la escena como avatares.
El sistema permitirá a los formadores presentar contenidos multimedia, elementos en 3D y entornos físicos con unas interacciones sencillas y un sistema de comunicación cómodo e inmersivo. Además, VIRTUALIZA ofrecerá datos analíticos de gran valor sobre el progreso académico de los participantes que permitirá tomar decisiones estratégicas sobre los procesos de capacitación que se desarrollen en el entorno.
Este proyecto, en el que participan Cluster SIVI, COTESA (Centro de Observación y Teledetección Espacial), ADIPER Servicios Sociosanitarios e ITCL Centro Tecnológico, surge para ofrecer una formación más personalizada a colectivos que se enfrenta una brecha digital que se va agrandando en sectores de los que son consumidores habituales, como la banca o el comercio. Esta necesidad queda patente con cifras como que más del 50% de los 9,3 millones de personas mayores de 65 años no poseen competencias digitales básicas.
Este proyecto es un ejemplo de cómo la aplicación de la tecnología puede generar un beneficio en cadena para los diferentes agentes de la sociedad, aportando valor no solo a las empresas que configuran el consorcio, sino también al propio sector asistencial, al sector de la formación, a los propios usuarios e incluso a la sociedad en su conjunto.
Este proyecto tiene una especial relevancia en el contexto social actual, con aproximadamente el 20% de la población española por encima de los 65 años, y cuando se habla de un nuevo concepto de cuidados a las personas mayores y dependientes, el cual, pasa por desarrollar cada vez más las tecnologías de los cuidados.
Además, un estudio reciente sobre Brecha Digital y Discapacidad realizado por la Cátedra de Brecha Digital y Diversidad Funcional (DicaTIC), junto a la UPV y la Consellería de Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, concluye que cerca de 62% del colectivo encuentra dificultades de acceso a Internet o durante su utilización. Entre los factores están:
- la falta de formación
- el coste de la conexión
- la ausencia de adaptaciones a las necesidades de usuarios con diferentes tipos de discapacidad, tanto en la presentación de los contenidos como en la navegación
Sin embargo, las personas con discapacidad en general consideran que las nuevas tecnologías les han aportado evidentes beneficios, que se relacionan, sobre todo, con la conexión y relación social.
Esto significa que hay una parte de la población española cuyas dificultades en el acceso y uso de las tecnologías digitales hacen que no puedan aprovechar los beneficios que brindan los avances en la digitalización y es necesario adaptar las tecnologías así a sus necesidades.
En este contexto, VIRTUALIZA trata de dar respuesta a esta necesidad global de la sociedad aportando una solución innovadora que apoye el proceso de formación y digitalización de las personas mayores y las personas con discapacidad. Además, no sólo reportará beneficios para los propios usuarios, destinatarios de los procesos formativos que en el citado entorno virtual se desarrollen. También servirá para mejorar la competitividad tanto de las PYMES que configuran el consorcio como, en general, de las
diferentes empresas del ámbito socioasistencial que podrán apoyar, evolucionar y mejorar sus procesos de formación gracias a VIRTUALIZA.
Por tanto, este proyecto se crea con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas en situación de dependencia a través de la aplicación de soluciones innovadoras con elevado componente tecnológico a los procesos de formación, y muy en particular para favorecer la capacitación digital de los usuarios.
