En el contexto del webinar ‘Deterioro Comportamental Leve como Pródromo de las Demencias’, organizado por CEAFA, el doctor Luis Agüera Ortiz enfatizó la relevancia de identificar y abordar los cambios psicológicos y de comportamiento como indicios tempranos de enfermedades como el Alzheimer y las demencias. Estos signos, aunque no garantizan un deterioro cognitivo inminente, deben considerarse como una importante alerta.

Específicamente, el concepto de deterioro comportamental leve engloba pequeñas variaciones en la personalidad y síntomas psiquiátricos o de comportamiento que preceden al deterioro cognitivo. Aunque esto no necesariamente implica un deterioro cognitivo inminente, el doctor subrayó la importancia de considerarlo como una alerta temprana de demencia.

Geriatricarea- Deterioro comportamental leve alerta temprana de Alzheimer
El deterioro comportamental leve engloba pequeñas variaciones en la personalidad y síntomas psiquiátricos o de comportamiento que preceden al deterioro cognitivo

En el webinar ‘Deterioro Comportamental Leve como Pródromo de las Demencias, organizado por la Confederación Española de Alzheimer y otras demencias (CEAFA), el doctor Luis Agüera Ortiz, miembro de la Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental (SEPSM), destacó que los cambios psicológicos o de conducta pueden preceder a la enfermedad de Alzheimer y otras demencias.

En el contexto de las demencias, los síntomas neuropsiquiátricos son altamente prevalentes, llegando a afectar hasta el 97% de los casos durante el curso de la enfermedad. Es común que pacientes con síntomas neuropsiquiátricos leves, pero sin evidencia de deterioro cognitivo, reciban diagnósticos psiquiátricos erróneos, como la depresión, lo que conduce a retrasos en el diagnóstico y una atención inadecuada.

El Dr. Agüera explicó que el deterioro comportamental leve se manifiesta típicamente en la edad madura o avanzada, persistiendo intermitentemente durante al menos 6 meses. Esto representa un cambio notorio en la personalidad o el comportamiento previo del individuo. En esta fase, se pueden ver afectadas cinco áreas de funcionamiento psicológico:

  1. la motivación
  2. el afecto
  3. el control de impulsos
  4. el ajuste social
  5. el pensamiento y percepción

El experto de la SEPSM recalcó que el deterioro en el funcionamiento social, ocupacional o interpersonal en el deterioro comportamental leve se atribuye a cambios en la personalidad y el comportamiento, no a un deterioro cognitivo evidente.

En cuanto a las opciones de tratamiento, el doctor señaló la necesidad de contar con herramientas más precisas para identificarlo en personas que aún no han desarrollado una demencia clara. En este sentido, se ha desarrollado la escala «Mild Behavioral Impairment Checklist (MBI-C) – Cuestionario de Deterioro Comportamental Leve» para capturar estos cambios sutiles en pacientes sin demencia manifiesta.

Esta herramienta es valiosa para estimar la prevalencia de este tipo de deterioro, pronosticarlo y considerar terapias tanto farmacológicas como no farmacológicas. Además, es una herramienta prometedora para la investigación neurobiológica, ya que detectar estadios leves de la enfermedad contribuye al entendimiento global de la misma.