Un artículo de DomusVi

En la actualidad, existe una amplia variedad de tratamientos para abordar algunas enfermedades y demencias que van más allá de los cuidados convencionales. Se trata de terapias, intervenciones o enfoques no farmacológicos que contribuyen a minimizar los síntomas psicológicos y conductuales de las personas que sufren deterioro cognitivo.

Diseñar un plan de cuidados personalizados es el elemento clave para implementar este tipo de tratamientos de forma óptima y eficiente. En este sentido, es necesario realizar una valoración de las habilidades motoras, sensoriales, cognitivas y de comunicación de cada usuario, lo que permitirá al terapeuta marcar los objetivos y el tipo de tratamiento más adecuado para cada persona, con el objetivo de brindarle los mejores cuidados en un entorno socialmente activo y estimulante.

Diseñar un plan de cuidados personalizados es el elemento clave para implementar las terapias no farmacológicas de forma óptima y eficiente

Una vez establecidos estos planes, un equipo que aúna diversos perfiles se encarga de su aplicación práctica. Psicólogos, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, auxiliares de enfermería y técnicos superiores de animación sociocultural (TASOC) concurren en la puesta en práctica de las terapias, según los objetivos individuales de cada usuario.

Una labor que requiere, por parte los profesionales involucrados, buenas habilidades en comunicación y capacidad para comprender y hacer frente a alteraciones de comportamiento, cambios en los estados de ánimo y las sensaciones y reacciones a los distintos tratamientos por parte de cada residente.

Cuidar a las personas en entornos activos y estimulantes

Guiados por el objetivo de cuidar a las personas en entornos activos y estimulantes, los equipos de los centros y residencias DomusVi se apoyan en múltiples herramientas como talleres, actividades y, por supuesto, una amplia variedad de herramientas tecnológicas que alientan la estimulación cognitiva.

Ejemplo de ello es la ‘Senior University’, basada en la noción de que durante la edad sénior podemos seguir formándonos y aprendiendo. Con la colaboración de IL3-Universidad de Barcelona (UB), este proyecto dirigido a residentes de los centros de la compañía brinda un programa académico semestral de extensión universitaria que otorga un diploma de Humanidades que, hasta la fecha, ya han obtenido cerca de 150 residentes.

Otras iniciativas como ‘Deporte y envejecimiento activo’, en colaboración con clubes deportivos como el Real Madrid o el FC Barcelona, ofrecen programas de actividad física para los mayores. Impulsado junto con la Fundación Obra Social Abanca, el proyecto ‘Pedalear y conversar’ conjuga el ejercicio físico y la socialización, acompañando a personas mayores con problemas de movilidad reducida a paseos en triciclo con la finalidad de proporcionarles una experiencia gratificante y estimulante.

Los programas ‘Emocionarte’ que combinan las actividades artísticas con el tratamiento de las emociones y los dedicados al autocuidado y autogestión, que trabajan la independencia y la participación, también suponen iniciativas no farmacológicas muy aceptadas.

Tecnología al servicio del bienestar

Con respecto a las terapias no farmacológicas basadas en el uso de nuevas tecnologías, destacan aquellas enmarcadas en los programas ‘Cerebrun valens’ que se sirven de multitud de dispositivos de realidad virtual, como el proyector MK360 de Broomx, que se usa en la residencia DomusVi Miraflores, y que permite a los usuarios aumentar su capacidad de evocar recuerdos y vivencias.

En este tipo de actividades se trabajan la atención, la memoria, la concentración e incluso las habilidades sociales, al disfrutarlas con otros residentes, y ponen de manifiesto la importancia de la estimulación cognitiva para mantener la mente en forma.

Ésta también se trabaja con las gafas 3D y los programas de visitas virtuales, que permiten trabajar la atención y la memoria, la estimulación de la atención sostenida además de encajar la terapia en un entorno de ocio. Esta terapia logra provocar una respuesta verbal, no verbal y emocional en las personas con deterioro cognitivo moderado o grave.

Del mismo modo, el sistema de entretenimiento y aprendizaje del proyector interactivo Obie potencia la atención de los residentes y mejora su interacción social gracias a los sensores de movimiento y a una gran variedad de juegos adaptados.

DomusVi también pone a disposición de sus usuarios herramientas para aliviar el estrés y la ansiedad, como la innovadora Cabina de Hidroterapia Lucía, diseñada por Isensi, en uso en residencias. Se trata de una confortable cabina de estímulos sensoriales, basada en los estudios de la ergonomía, que, mediante el efecto hidromasaje con agua pulverizada, ayuda a los cuidadores en las rutinas de higiene de los residentes y, a la vez, gracias a la vasodilatación y al efecto de relajación que proporciona, tiene un efecto analgésico que relaja el cuerpo y la mente del usuario.