Un estudio internacional, liderado por el profesor Matthew J. Lennon de la University of New South Wales (Australia) investiga la relación entre la hipertensión arterial y el riesgo de demencia en personas de edad avanzada, incluyendo la enfermedad de Alzheimer. Los resultados indican un incremento del 42% en el riesgo de demencia en individuos hipertensos no tratados en comparación con aquellos con presión arterial normal.

La hipertensión arterial, un problema de salud común en la población de edad avanzada, ha sido objeto de un estudio internacional dirigido por el profesor Matthew J. Lennon de la University of New South Wales de Australia. Este estudio, que incorpora datos del Proyecto ZARADEMP (ZARAgoza-DEMencia-DEPresión) llevado a cabo en Zaragoza por los investigadores Antonio Lobo, Concepción de la Cámara y Elena Lobo-Escolar, revela hallazgos cruciales sobre la relación entre la hipertensión y el riesgo de demencia, en particular, la enfermedad de Alzheimer.

Geriatricarea- hipertension y demencia
El riesgo de demencia es mayor en individuos hipertensos no tratados

La investigación, publicada en la prestigiosa revista JAMA Network Open de la American Medical Association y que ha contado con participación de la Universidad de Zaragoza y el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón, aborda una controversia previa sobre si la hipertensión conlleva riesgos de demencia en personas de edad avanzada.

Para resolver esta incógnita, se analizaron datos de 17 estudios en 15 países de 5 continentes. Estos estudios involucraron un seguimiento a lo largo del tiempo de cohortes representativas de la población general, similar al enfoque en el Proyecto ZARADEMP en Zaragoza.

En total, se incluyeron 34.519 individuos mayores de 60 años, con una edad promedio de 72,5 años al inicio del estudio. Se recopilaron datos médicos, información sobre la salud mental y se realizaron extensas evaluaciones, incluyendo mediciones de presión arterial y valoraciones de la función cognitiva.

Este análisis se llevó a cabo durante un seguimiento «longitudinal» con una duración promedio de 4,3 años, lo que permitió examinar cambios en múltiples oleadas consecutivas. Los datos se sometieron a rigurosos métodos estadísticos, incluyendo análisis de sensibilidad y ajustes de variables de confusión.

Los resultados son claros. Los individuos hipertensos no tratados tienen un riesgo un 42% mayor de desarrollar demencia en comparación con aquellos con una presión arterial normal. Además, aquellos hipertensos tratados con medicamentos anti-hipertensión no presentan un riesgo significativamente mayor de demencia en comparación con individuos con presión arterial normal. Estos hallazgos se aplican independientemente de la edad, el sexo o el grupo racial de los participantes.

Las personas interesadas pueden consultar aquí el articulo «Use of Antihypertensives, Blood Pressure, and Estimated Risk of Dementia in Late Life. An Individual Participant Data Meta-Analysis», publicado en JAMA Network Open.