El proyecto MIRATAR de la Universidad de Castilla La Mancha, realizado en colaboración con Tercera Actividad, desarrolla un espejo interactivo para mejorar el envejecimiento activo y saludable de las personas mayores. Esta innovación, sometida a pruebas piloto, monitorea factores de riesgo y promueve la colaboración interinstitucional en el cuidado de mayores.

Valeriano, residente en el centro de atención a personas mayores o dependientes Tercera Actividad que la Fundación Santa María la Real gestiona en Valdelafuente (León), se encuentra frente a un espejo peculiar bajo la supervisión de Marta García, fisioterapeuta del centro.

Este no es un espejo común: es interactivo y forma parte del proyecto MIRATAR, desarrollado por el equipo de investigación ARCO de la Universidad de Castilla La Mancha, con el propósito de facilitar un envejecimiento activo y saludable.

Este innovador espejo está siendo sometido a pruebas piloto en las que participan Valeriano y otros residentes. Junto a la fisioterapeuta, realizan ejercicios simples mientras el espejo les corrige y les guía. Estas pruebas permitirán mejorar los espejos interactivos, adaptándolos incluso para personas en silla de ruedas, con programas específicos para trabajar el equilibrio, la respiración y técnicas para controlar la ansiedad y el nerviosismo.

El espejo interactivo monitorea los factores de riesgo más importantes que afectan a la salud de las personas mayores, ayudando a prevenir y mitigar posibles riesgos. Su implementación ha sido posible gracias a la colaboración entre Tercera Actividad y el Departamento de Tecnologías y Sistemas de Información de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) en el Campus de Ciudad Real.

Este acuerdo representa un paso significativo hacia la mejora de la calidad de vida de las personas mayores, utilizando la innovación tecnológica y la colaboración interinstitucional para promover su bienestar.