Las soluciones constructivas son clave a la hora de crear espacios que promuevan un adecuado confort acústico en los centros hospitalarios y sociosanitarios, generando un impacto directo en el descanso y recuperación de los pacientes, y también en el trabajo de los sanitarios.

Y es que durante los últimos 40 años, los niveles promedio de ruido en los hospitales han aumentado en 15 decibelios, alcanzando niveles de alrededor de 70 decibelios, muy por encima del límite recomendado de 35 dB de la Organización Mundial de la Salud para lograr un adecuado confort acústico que favorezca la recuperación de los pacientes.

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Un adecuado confort acústico que mejora la recuperación de los pacientes y el trabajo de los sanitarios

Desde Saint-Gobain Ecophon, compañía especializada en soluciones acústicas, recalcan la importancia de un adecuado acondicionamiento acústico en centros hospitalarios y destacan tres factores para lograr un buen acondicionamiento acústico en los entornos sanitarios:

  • dar espacio a la recuperación (mantener los niveles de sonido bajos)
  • asegurar que los espacios inviten a la comunicación (mejorar la claridad del habla)
  • asegurarse de que las soluciones acústicas cumplen las exigencias higiénicas

Si se dan estas circunstancias, son muchos los beneficios tanto para los pacientes como para el personal:

  • disminución del nivel de presión arterial
  • mejora de la calidad del sueño
  • reducción de la ingesta de medicamentos para el dolor de los pacientes
  • disminución de los niveles de estrés, entre otros

Tal y como destaca Juan Negreira, doctor ingeniero acústico y director técnico y de marketing de Ecophon, “necesitamos imitar la naturaleza y el ambiente exterior, donde nuestro sistema auditivo se ha desarrollado durante tantos años. Es decir, instalar un ‘cielo’ acústico (en forma de un techo absorbente clase A) y unas ‘paredes laterales abiertas’ para que el sonido escape hacia los lados (mediante paneles absorbentes de pared), para así bajar los niveles generales de ruido, mejorar la claridad de la palabra, reducir la propagación del sonido y, en definitiva, proporcionar confort acústico a las personas que estén en el interior de los hospitales”.

Además, este experto recalca que el acondicionamiento acústico en residencias y centros hospitalarios juega un papel fundamental en la salud auditiva de las personas mayores. “La pérdida auditiva es la forma más común de discapacidad en Europa, y es más común y probable sufrirla a medida que envejecemos, cuando también es más probable padecer de demencia”, señala este experto.

“Un buen acondicionamiento acústico debería aumentar el confort y potenciar las capacidades cognitivas de las personas con discapacidad auditiva y demencia, para así facilitar las tareas diarias y reducir el riesgo, en entornos ruidosos, de por ejemplo no escuchar y/o entender anuncios importantes o alarmas de emergencia”, añade.