La limpieza de las manos es fundamental para prevenir la propagación de enfermedades infecciosas, tal y como ha puesto de relieve la pandemia. Sin embargo, la higiene de manos es igualmente importante en otras situaciones, como antes y después de comer, después de usar el baño y después de tocar objetos que puedan estar contaminados. Y es que, según la OMS, se estima que alrededor del 80% de todas las infecciones se transmiten por contacto, especialmente a través de las manos.

Desde la compañía HARTMANN, proveedor de soluciones de sistemas para la medicina y la asistencia sanitaria, ofrecen una serie de consejos y recomendaciones para llevar a cabo una correcta y eficaz higiene y desinfección de las manos:

  • Antes y después de comer: Es importante desinfectarse las manos antes de comer, ya que las manos pueden estar contaminadas con gérmenes y bacterias que pueden enfermarnos. También es importante realizar la higiene de las manos después de comer, ya que puede haber restos de alimentos y bacterias en las manos.

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Se estima que alrededor del 80% de todas las infecciones se transmiten por contacto, por ello es especialmente importante seguir una correcta higiene de las manos
  • Después de ir al baño: Se recomienda desinfectarse las manos con agua y jabón después de usar el baño, ya que esta es una de las formas más comunes de propagación de gérmenes y bacterias.

  • Después de estar en contacto con una persona enferma: Es importante que después de estar en contacto con una persona enferma, realizar la higiene de manos, ya que esto puede ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad.

  • Es recomendable tener disponible desinfectante de manos en lugares donde no sea posible el acceso al agua y al jabón. Esto puede hacer que las personas se sientan más cómodas en la realización de sus actividades cotidianas.

  • A la hora de desinfectarse las manos, hacerlo frotando cuidadosamente el desinfectante de manos durante 30 segundos cubriendo todas las áreas de la piel.

  • Se debe prestar especial atención a las yemas de los dedos y pulgares: son de particular importancia ya que entran en contacto con mayor frecuencia con superficies potencialmente contaminadas. Además, las yemas de los dedos albergan las concentraciones más altas de bacterias en comparación con otras áreas de la mano.