Aplicar un modelo de atención integral a pacientes geriátricos durante su hospitalización por Covid-19 evita en el 70% de los enfermos el deterioro funcional y reduce la mortalidad y la necesidad de traslado a un hospital de agudos, tal y como revela un estudio del Centro Dr. Emili Mira del Hospital del Mar, publicado por la revista Geriatric Nursing.

Y es que las condiciones de aislamiento necesarias en enfermos infectados por la COVID-19 pueden empeorar el el deterioro funcional que ya de por sí genera la hospitalización de este tipo de pacientes. En este sentido, los autores del estudio han analizado la evolución de los enfermos de edad avanzada ingresados en la Unidad Covid-19 del centro durante la primera ola de la pandemia. Fueron atendidos por un equipo multidisciplinario que incluyó geriatras, enfermeras especializadas, trabajadores sociales, farmacéuticos y fisioterapeutas.

En la imagen, parte de los autores del estudio. De izquierda a derecha, Noemí Martín, el Dr. Gabriel Vallecillo y Marta Anguera

Ofrecer un seguimiento de atención integral y multidisciplinario a los pacientes de más edad ingresados por Covid-19 que presentan fragilidad, permite reducir el impacto de la hospitalización y el aislamiento en su capacidad funcional. Así lo demuestra este estudio de médicos y enfermeras del Hospital del Mar, que valida la utilidad de este modelo de atención integral, ACE (Acute Care for Elders, por sus siglas en inglés).

El estudio ha hecho un seguimiento de 51 pacientes ingresados durante la primera ola de la Covid-19 en el Centro Dr. Emili Mira, un centro especializado en la atención a enfermos psiquiátricos y geriátricos del Parc de Salut Mar. Para evitar el deterioro funcional propio del ingreso hospitalario por enfermedad aguda en los enfermos de edad avanzada (entre el 30 y el 80% de los pacientes geriátricos ingresados en un hospital sufren una disminución de sus capacidades a consecuencia de la estancia hospitalaria), que en el caso de la Covid-19 es más importante por las restricciones que se deben aplicar en las unidades confinadas, se aplicó un modelo de atención integral, ACE.

Tal y como destaca la Dra. Maria José Robles, responsable de la Unidad de Ortogeriatría del Hospital del Mar y última firmante del artículo, esto supone «el trabajo de un equipo multidisciplinario, formado por enfermeras geriátricas, auxiliares de enfermería especializadas, una trabajadora social, fisioterapeutas y un geriatra especializado en enfermedades infecciosas».

«El equipo multidisciplinario desarrolló un plan de cuidados basado en el modelo ACE, con el objetivo que el paciente pudiese volver a su estado funcional de base, con un seguimiento semanal de su evolución», señala la Dra. Robles. En el momento del ingreso, 9 de cada 10 pacientes presentaban un grado elevado de dependencia, que las condiciones de hospitalización hubiesen podido empeorar. A pesar de ello, en el momento del alta, el 70% de ellos mantenía su capacidad funcional previa al ingreso en la Unidad Covid-19. A la vez, se observó una tasa de mortalidad menor que en el conjunto de pacientes de su edad y un número muy bajo de traslados a centros hospitalarios de más complejidad.

El modelo ACE puede implementarse con facilidad en la atención clínica diaria

El Dr. Gabriel Vallecillo, autor principal del estudio, médico adjunto del Instituto de Neuropsiquiatría y Adicciones del Hospital del Mar (INAD) e investigador del Grupo de Investigación en Adicciones del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), apunta que «hemos podido observar que el modelo ACE puede ser implementado con facilidad dentro de la atención clínica diaria de los pacientes geriátricos en las unidades Covid-19, y que es eficaz para prevenir su deterioro funcional y cognitivo«. A la vez, resalta «el rol fundamental del personal de enfermería, ya que es el responsable de la prevención de síndromes geriátricos y de la implementación de las intervenciones básicas para promover y mantener la movilidad y el autocuidado de los pacientes».

Unos resultados obtenidos, según el Dr. Vallecillo, en un grupo de enfermos «con una elevada comorbilidad y fragilidad, que son factores que predisponen para el deterioro funcional durante el ingreso hospitalario agudo». Durante su estancia hospitalaria, dos de cada tres pacientes sufrieron otra patología a parte de la Covid-19, siendo el delirio la más habitual. Esto lleva a los autores a recomendar una monitorización estrecha de los síntomas de esta enfermedad en las unidades confinadas, con unas condiciones que pueden propiciar desorientación y falta de conciencia, para limitar sus efectos negativos.

Artículo de referencia
Gabriel Vallecillo, Marta Anguera, Noemi Martin, Maria Jose Robles, Effectiveness of an Acute Care for Elders unit at a long-term care facility for frail older patients with COVID-19, Geriatric Nursing, 2020, ISSN 0197-4572, https://doi.org/10.1016/j.gerinurse.2020.10.004.